El sistema operativo Debian GNU/Linux de código abierto, que ha resultado más influyente que cualquier Linux junto a Red Hat, ha lanzado recientemente en Internet su nueva versión 5.0.
La versión 5, que también es conocida por el nombre de “Lenny” (inspirado en Toy Story), hace gala de algunas de las excelentes herramientas de gestión, y el amplio soporte de arquitecturas de procesador que han caracterizado a las versiones previas de Debian. Además, la nueva versión incluye algunas actualizaciones muy significativas en los componentes de código abierto que la componen.
A diferencia de la última versión Debian 4 analizada, que me impresionó mucho por su encriptación de disco y que la hacía líder entre las distribuciones rivales, Lenny no supone un avance significativo de Debian y los sistemas Linux en general. Más allá de las actualizaciones de los paquetes de software, la mejor razón para que los actuales usuarios de Debian se actualicen a la nueva versión es que, por razones de seguridad del proyecto, la versión 4 dejará de tener soporte de actualizaciones de seguridad justo un año después de la fecha del lanzamiento oficial de Lenny.
La estabilidad y su larga trayectoria son frecuentemente citados como las grandes razones para elegir Debian, particularmente en entornos servidor, donde los administradores desearían “configurar y olvidarse” de sus máquinas. Sin embargo, los escasos tres años de parches de seguridad que aplican las versiones de Debian se antojan escasos comparados con los cinco de cobertura que ofrece Ubuntu en sus versiones Long Term, o los siete del gratuito CentOS, que deriva directamente de Red Hat Enterprise Linux.
Aún así, Debian es una gran elección para entornos servidor, y se encuentra particularmente bien posicionada para alojar aplicaciones que se apoyan en componentes de código abierto como Apache, MySQL, o cualquier otra de las cientos de aplicaciones que el proyecto Debian incluye en sus paquetes para una sencilla instalación a partir de uno de los muchos repositorios del proyecto.
A menudo utilizo Debian para poner en marcha servidores virtuales que utilizo para mis pruebas, sobre todo desde que el excelente instalador basado en texto de esta distribución hace bastante sencillo cargar Debian en cualquier servidor Linux que necesite. Y más aún desde que encontré los applets de configuración que vienen con muchos paquetes de Debian, y que hacen muy fácil configurar y poner en marcha componentes con los que estoy poco familiarizado.
Debian 5.0 también puede funcionar bien como sistema operativo para equipos de escritorio, en parte gracias a lo que parecen ser contribuciones de las versiones de Ubuntu que a su vez están basadas en los cimientos de Debian. Por ejemplo, durante mis pruebas con Lenny, encontré el mismo sistema de actualizaciones y herramientas para agregar/quitar programas que utilizo en mi Ubuntu.
Debian 5.0 utiliza por defecto GNOME 2.22.2 como interfaz de escritorio, aunque también cuenta con KDE 3.5.10 y Xfce 4.4.2, así como otras opciones menos conocidas como alternativas al entorno gráfico.
Por otra parte, el amplio soporte de procesadores ofrecido por Debian -que abarca 12 arquitecturas y supone, que yo sepa, la distribución Linux con más versiones- hace de Debian una opción creciente en el mundo de las implementaciones de Linux en sistemas embebidos.
Debian esta disponible gratuitamente para descargar desde el FTP del proyecto Debian o alguno de sus mirrors, vía www.us.debian.org. Como es una entidad no comercial, el proyecto Debian no ofrece soporte más allá de los propios recursos de la comunidad, aunque el proyecto mantiene un listado de compañías que ofrecen servicio de soporte de manera directa (Consultores ).
La distribución Debian completa, que incluye todos los paquetes que pueden ser distribuidos gratuitamente desde el repositorio principal del proyecto, incluye 31 CDs o 5 DVDs. Yo generalmente descargo la distribución de 180 Mbytes para la instalación vía red, y luego cargo sólo los paquetes que realmente necesito desde el mirror más cercano a mi ubicación
Lenny en el Laboratorio
He probado la versión x86 de Debian 5.0 ejecutándose en unas pocas máquinas virtuales funcionando sobre el VirtualBox, de Sun Microsystems. También lo he probado en mi portátil Lenovo Thinkpad T60 sin problemas, incluidas las siempre problemáticas funciones de hibernar y suspender. Por otra parte, con la gestión de energía siempre presente, Lenny incluso soporta de serie la gestión de la frecuencia del procesador.
En una de mis instancias virtuales de pruebas con Debian, creé un escenario que incluía la actualización desde un Debian 4 (llamado Etch), y ejecuté la instalación de MediaWiki/Apache/MySQL. El soporte para la actualización in-situ de máquinas de producción es una de las posibilidades de las que más han alardeado en el proyecto Debian y, en su mayor parte, mi experiencia actualizando el servidor Etch a Lenny funcionó sin problemas.
Como informa la ingente documentación del proyecto, modifiqué la configuración de mis sistemas de pruebas de software para buscar los paquetes de Lenny en la nueva ubicación, y procedí a actualizar primero mis herramientas de software y después el resto del sistema. Cuando reinicié puede acceder a mi nuevo sistema Lenny, sin embargo, mi servicio MediaWiki fue innaccesible hasta que, como me figuraba, ejecuté un cambio necesario en el archivo de configuración de Apache.
Considerando que realicé mi instalación completa de MediaWiki desde los repositorios de Debian, habría estado bien si el sistema hubiera realizado este cambio de configuración como parte de la actualización. También me hubiera gustado ver el script necesario para actualizar la base de datos de MediaWiki durante el proceso. Etch incluye la versión 1.7 de MediaWiki, mientras que Lenny viene con la versión 1.12.
Considerando la complejidad de las actualizaciones a nivel de aplicación (particularmente una que involucra varios componentes, como es el caso de MediaWiki), estaría bien ver que el proyecto Debian lograse el objetivo de empaquetar y ofrecer opciones de instalación para appliances completos de software. Quizá en futuras versiones de Debian.
Vivir libre, o no
Cuando se trata de promover y garantizar los ideales del software libre en las aplicaciones y componentes que distribuye, el proyecto Debian esta entre los más estrictos. Por ejemplo, Debian entrega versiones del navegador Web Firefox renombradas como “Iceweasel”. Incluso hubo un enfurecido debate entre los desarrolladores de Debian sobre si se eliminaba todo el software que requiriese de firmware propietario para el sistema.
Con toda su reputación de fanáticos de lo libre, sin embargo, Debian hace bastante sencillo poner en marcha una instalación Linux aunque no sea filosóficamente pura. Por ejemplo, cuando instalé Lenny en mi Thinkpad T60, el instalador informó de que necesitaba un archivo binario de firmware específico para hacer funcionar mi adaptador WiFi Intel 3945ABG. El sistema me indicó el nombre del archivo requerido, y me ofreció la posibilidad de enchufar una unidad USB desde la que cargar dicho firmware (lo que hice, después de conseguir el archivo desde una máquina Ubuntu que tenía cerca).
De manera similar, una vez que terminé mi instalación de Lenny, encontré que un disco duro externo USB formateado con el sistema NTFS de Microsoft no se montaba automáticamente, como ocurre con otras distribuciones Linux. Sin desanimarme, abrí la aplicación de instalación de software de Debian, busqué el término “ntfs”, e instalé el paquete ntfs-3g. Una vez el paquete estuvo instalado, el icono de mi unidad USB apareció de repente en mi escritorio.
Debian 5 viene con Swfdec, el reproductor flash de código abierto, que funcionó correctamente reproduciendo vídeos de Youtube y visitando Webs basadas en Flash, o con anuncios basados en esta tecnología. Ahora bien, Swfdec no fue capaz de manejar todos los contenidos Flash que encontré, como por ejemplo el reproductor de música de Pandora.com. Sin embargo, pude instalar fácilmente el reproductor Flash propietario de Adobe, con sólo pinchar en la casilla “non-free” de la utilidad de instalación de software, instalando así el citado reproductor a través de las herramientas habituales
Fuente: .eweekeurope.es