En un comunicado publicado este lunes en su página web oficial, el proyecto Debian anunciaba la disponibilidad de su política de patentes, que a grandes rasgos pretende impedir la relación del sistema y su entorno con software gravado con patentes. El objetivo, más allá de ofrecer una plataforma libre en cuanto a posibles responsabilidades jurídicas, sean éstas susceptibles de acciones legales o no -es el caso de las patentes FRAND-, se basa en erradicar por completo cualquier software licenciado con patentes que entren en conflicto con el Contrato Social de Debian o las directrices de software libre de Debian. La política de patentes del proyecto Debian ha contado con el asesoramiento del Software Freedom Law Center, que destaca que “con la aprobación de esta política de patentes, Debian se prepara para defender a sus desarrolladores y usuarios con mayor eficacia, fuerza y conocimiento de causa.” Asimismo, desde Debian se ensalza la posición contraria a la lacra de las patentes tecnológicas:

Más información: Debian “El proyecto Debian mantiene una postura crítica con respecto a las patentes de software: tenemos en cuenta que las patentes de software son una amenaza para el software libre y un obstáculo para la misión de Debian de proporcionar un sistema operativo completamente gratuito para uso de todos. Creemos que las patentes de software no ofrecen ninguna ventaja en la promoción de la innovación de software y animamos a nuestros autores originales de oponerse a las patentes de software.”